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Un hombre trans iraní-estadounidense viaja en el tiempo a un archivo LGBTQ+ para comprender su sexualidad. Se encuentra con su yo pasado y presente durante un viaje erótico de autodescubrimiento. Este es un documental sobre personas transgénero homosexuales de mujer a hombre y de mujer a hombre. Se centra principalmente en la vida después de la transición, con poco enfoque en el proceso de transición en sí. También trata sobre aquellos cuya orientación física es masculina. Hay dos categorías principales de sujetos. Uno es Lou Sullivan, un activista trans de F a M que también fue pionero en identificarse como gay. Está representado por múltiples extractos de entrevistas que ha dado en televisión, además de los escritos de un corresponsal suyo. Los otros son una serie de entrevistas con varias personas trans de diferentes presentaciones y anatomías: un sujeto identificado como hombre insistió en mantener su vagina. A menudo tienen problemas para encontrar parejas para la intimidad, aunque la Noche Trans en los baños públicos gay es una gran ayuda porque no tienen que explicarse. Esto está envuelto en un drama narrativo. Un hombre trans iraní-estadounidense (que abandonó Irán poco después de la revolución) va a un archivo gay en Chicago para investigar y se hace amigo de un empleado trans más joven y aniñado. El ángulo iraní se realza con conversaciones sobre una «tortilla» iraní; un plato. Este enfoque híbrido agregó interés y lo hizo sentir más que la aridez de un simple documental. Vi esto como parte de un festival de cine, con el elenco y el director presentes. El director mencionó que el actor iraní ayudó a hacer una breve «prueba de concepto» para solicitar fondos y se continuó, con acentos iraníes agregados al guión. El otro actor era un activista y su papel fue escrito pensando en él.
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